En el mundo de la construcción en general, es habitual oír hablar de hormigón cuando se trata de suelos: hormigón armado, hormigón estructural, pero el hormigón de cal se utiliza mucho en la rehabilitación de nuestras casas antiguas, en los suelos de edificios protegidos y, cada vez más, en la construcción sostenible. Este hormigón se denomina, por tanto, hormigón de cal, una solución para suelos (pavimentos).
Los hormigones de cal son una alternativa a los hormigones tradicionales, a menudo compuestos por cemento. Permiten crear pavimentos interiores en la renovación de edificios antiguos (suelos de bodegas, bodegas, suelos de monumentos históricos, casas antiguas individuales). Además, también son perfectamente adecuados para nuevas construcciones y viviendas ecológicas.
La creación de un suelo de hormigón de cal es una base esencial para estabilizar el revestimiento y permitir los intercambios higrométricos entre el suelo y las paredes en los llamados edificios antiguos. Cuando el sistema suelo/pared/techo se diseña de forma coherente, se evita gran parte de las patologías futuras que pueden aparecer muchos años después. Entonces, ¿por qué privarnos de ello?
Ofrecidas en su uso clásico (cal hidráulica natural + arena/grava) o mezcladas con otros áridos / arena, estas diferentes soluciones tienen propiedades diferentes, pero ofrecen así más opciones al aplicador. Descubra a continuación nuestras diferentes soluciones de hormigón de cal y los consejos técnicos de aplicación asociados para sus trabajos.
